222 noches

No fue un número elegido al azar. Tampoco fue elegido para minar tu entrega y disposición. El día que terminó porque así lo sentí fue cuando lo contabilicé. Ese número es tu número, de nadie más, no es más o menos, es lo que te hace pertenecerme como lo haces. La primera noche, silenciosa y …

Un día en las carreras – I –

Es una experiencia, dedicar un rato en la vida al menos, a comprarle ropa interior. Hace mucho, entraba, y cabizbajo murmuraba algunas cosas ininteligibles sobre la talla y la copa del sostén, sin que se notase demasiado que estaba más que avergonzado. Menos mal que luego, follar en sitios públicos o que te la coman …

El respeto

El dominante no se acerca a todo el mundo, sólo busca los que son dignos de su trato. Tampoco huye de todo el mundo y sí sólo de aquellos que merecen bien que se huya de trabar relaciones con ellos. Se debe dar gracias a que haya gente mucho más sabia que uno mismo, para darse …

Flames

El fuego purifica. No es verdad pero queda muy bien decirlo. El fuego duele de cojones. También lo de las marcas se ha puesto de moda y es lógico. Tener tatuajes es muy trendi así que como es de suponer, lo que impera, sirve como marca de estilo. Y claro, en esto de la moda, …

House of Lords

Tenemos una tendencia natural a crear ghettos, reductos solitarios en los que resguardarnos y creemos que estamos no sólo en la posesión de la verdad, sino en una seguridad perfecta de nuestros actos y pensamientos. Sucede en todas las tendencias artísticas, en todas las expresiones que el ser humano es capaz de desarrollar. Cuanto más …

El caleidoscopio.

Los sentimientos son despreciables. No es cierto claro, los sentimientos nos conmueven, nos alegran, nos entristecen, nos violentan y nos hacen odiar. Pero todos ellos, los de la sumisa en este caso, deben ser conocidos. Su mente, es un caleidoscopio de emociones encontradas, de frustraciones a flor de piel que necesitan ser percibidas y comprendidas. …

Abstinencia

Era adorable. Todo lo que le rodeaba así le hacía parecer. Desde su mirada inocente y perturbadora, sus gestos pausados y delicados, su pelo infinitamente largo, tan largo como sus piernas. La turgencia era tan arrebatadora, que todo lo que giraba en torno a ella quedaba atrapada en un campo gravitatorio perfecto. Sonreía frente a …