Perspectivas de fracaso
La cubertería tenía un tacto agradable. Las filigranas le proporcionaban no solo belleza, sino rugosidad suficiente para que el agarre fuese perfecto. Mientras masticaba no dejaba de mirar, curioso como siempre. Ella, comía despacio, frenada por sus pensamientos y sus tribulaciones. Pensaba que algo iba mal o que iría mal, no estaba segura. El silencio …