Dar cera, pulir zorras.
Se le veía contento, el pecho hinchado, mucho gozo y suficiencia. A su lado un par de nenas, parecían novatas y se miraban desafiantes, como intentando conseguir el galardón de rookie del año. A él, por su porte, parecía que le importaba una puta mierda. Un pasito atrás cada una, esbeltas figuras, una de ellas, …