Microcortes
Le erizaba la piel. El sonido del metal reverberaba una y otra vez en sus recuerdos. Siempre que a él le apetecía dar un paseo con el acero por su piel terminaba con una comezón que le hacía perder completamente la cabeza. A veces, él se deleitaba separando las capas de piel con precisión, solapándolas …