A vueltas con la bestia

Los seres humanos son extremadamente complejos en sus pensamientos más simples. Lo primario es abandonado porque está confrontado a la razón. Somos seres esencialmente sociales que necesitamos unas pautas y unos valores estables y reconocidos por todos y en donde nos aclimatamos y adaptamos para llevar una vida feliz y completa. Casi siempre es un …

Ordenando piezas

Nunca una joya tan valiosa estuvo tanto tiempo en el fango. Pero incluso allí brillaba la muy hija de puta. Se había pasado toda la vida esquivando lo inevitable, de manera envidiable y casi sin que se notase. En su cabeza resonaban todas las disputas y cuando se miraba al espejo sólo veía a una …

Recuerdos

No te percatas de las ruinas hasta que las manos dejan de percibir el roce, el olfato la miel convertida en piel o el gusto amargo de su elixir se convierte en una ensoñación lejana. No por ello las ruinas tienen que ser elementos destrozados por las vivencias ni tampoco destartalados y vacíos recordatorios de …

Dentro del círculo

Dunbar explicaba que nuestra forma de relacionarnos viene limitada por la cantidad de tiempo que dediquemos y por el esfuerzo mental que asociemos al mismo. Es difícil entrar en un círculo, pero sumamente fácil salir de él. Los principios básicos giran en la longitud de la circunferencia y cuando se aceptan, ésta se vuelve permeable. …

Restauradora de tiempo

De entre todas sus cosas siempre le atrajeron sus cuadernos, sus libretas, los papeles y legajos que iba amontonando en pilas y que dejaba sobre la mesa o en el suelo. Siempre deseó ver de primera mano cómo trabajaba su mente, como la tinta se expandía en el papel, cómo jugaban las palabras con las …

El vino y la barra

Como todos los años por estas fechas los nervis se atenazaban en el estómago. Trescientos días al año conseguía desconectar de aquel momento de ruptura con la realidad y seguir con su vida cotidiana, la familia, el trabajo, los queaceres de una mujer adulta e independiente que mantenía los lazos de una vida en compañía …

Colgados

Eran tan normales que reían sin parar. Quizá era esa la cualidad más hermosa que tenían cuando se rozaban o se miraban. Sabían que no durarían mucho tiempo, pero no les importaba porque incluso en los silencios se mantenían unidos. Tanta imperfección era atractiva, aunque no se daban cuenta de que los dos eran suficientemente …

Aguja y luz

Después de un par de horas con la cabeza cubierta y el cuerpo exhausto, la mente se había precipitado desbocada a un vertiginoso descenso hacia la luz. Los brazos exiguos caían hacia atrás mientras el cuello era sujetado por las manos que durante todo aquel tiempo le habían proporcionado más placer que dolor. Notó como …

Bajo la escalera

Cuando los dedos se aferran a los barrotes o a la madera astillada, la carne se blanquea impulsada por la fuerza irrefrenable de una caída incontrolada que a menudo nos asusta. Casi siempre a mitad de camino e incluso antes, abandonamos, lo dejamos todo, damos la espalda a quién nos acompaña en ese descenso por …

Púrpura y cáñamo

Cada vez que tensaba y luego comprobaba que los dedos pasaban con seguridad entre la piel y la cuerda, sentía un latigazo que le atravesaba el costado y reposaba en su coño. Hacía ya mucho tiempo que se abandonaba a esa suerte enfermiza de no saber lo que iba a suceder, pero teniendo claro que, …