A veces falla
Un lugar para llorar. Eso echaba de menos, derrumbarse algún que otro instante, cuando la furia había pasado de largo y el resuello se había calmado. La presión a la que sometía a diario a sus emociones dejaba mella visible en su cuerpo. Tiempo atrás era capaz de mantenerlas dentro de su cabeza, impasible mientras …