Sediento

La cuerda se mecía y silbaba un poco por el roce de la argolla. La barra de acero era firme y la cuerda formaba un triángulo equilátero perfecto. Sonrió al imaginarlo en mitad de una filarmónica, resonando entre las cuerdas de las violas. Ella ahora se balanceaba, con su piel suave y salpicada de lunares, …

Ese fabuloso caos ordenado

Las horas se disipaban entre el fulgor de sus miradas. Para él, sorprendido siempre de que pudiese sumergirse en aquellos ojos brillantes, tanto que le cegaban el corazón. Con la mirada recortaba la curiosa forma que hacían de su cara un paraje en el que perderse y encontrarse siempre en su entrepierna. La lejanía a …

El jardinero

Cuando la tierra caía de sus manos, lo hacía con todo el sentido que su mundo podía darle. La simpleza de los movimientos, la cautela de sus dedos, colocando las ramas, arrancando hojas, invisibles tormentos que conseguían el fin determinado. La rectitud y la perfección. Se veía a si misma observándole con mirada hipnótica, observando …

El círculo virtuoso – VI –

Se sentía como un pedazo de hielo deshaciéndose sobre el suelo. El cuerpo desgastado y maltrecho aunque pleno, empapado y mezclado con el sudor, el flujo y la sangre que dibujaba en el suelo una perfecta figura asimétrica, casi sólida. La respiración se le iba normalizando, entrando en monótonos ritmos mientras las manos, dibujaban círculos …

El círculo virtuoso – V –

Es difícil conjugar de la mejor manera posible el desenfreno con el control. Saber que no puedes dejarte llevar simplemente por tus pasiones aunque las tengas a flor de piel, sabedor de que puedes confundir y además hacer bastante daño. Cegarse ante una imagen hermosa y un cuerpo plácidamente entregado en mitad de una tormenta …

El círculo virtuoso -IV –

Perfectos charcos circulares se habían formado bajo su boca y su sexo que no paraba de temblar, ya dolorido. La saliva goteaba sin descanso en una cascada permanente que prácticamente cubría el espacio entre sus labios y el suelo. Con la vara en la mano acerqué mis labios a una de sus mejillas y la …

El círculo virtuoso – III –

Cada nudo es una experiencia, al menos uno debe creer que lo es, cada uno de ellos contará una historia en tu piel, le decía mientras deslizaba la cuerda. Cada historia genera un recuerdo y cada recuerdo será un momento de tensión, un roce, una presión. La cuerda separará tus labios, aprisionará tus extremidades, inmovilizará …

El círculo virtuoso – II –

Laurita tiene el pelo largo y eso es delicioso. Mientras mis palabras arrasaban sus pensamientos, mi mano iba enrollando su cabello alrededor de la muñeca. La tensión crecía y sin darse cuenta, su cuello empezó a inclinarse hacia atrás, dejando ver su hermosa piel aprisionada por mis dedos. La delicadeza de los susurros se mezclaba …

Has llegado a casa

Sólo necesitas una persona que te comprenda para dejar de sentirte un incomprendido. Solo una, nada más. Encontrar a esa persona ya no es tan sencillo. Imagino cada día millones de bosques y millones de personas perdidas en ellos, una en cada uno, deslizándose entre los árboles, viendo siempre el mismo paisaje, troncos, ramas caídas, …

El simposio – I –

Entre tanto gentío se podía divisar con precisión las marcas que las cuerdas habían dejado en sus tobillos. Ni siquiera las medias negras podían disimular la piel moldeada por el algodón. Eran marcas de presión, precisas, hechas con cuidado, con mimo, con pausa. Trasmitían el deleite de quien con manos expertas, deslizaba las cuerdas y …