El cepillo

Adoraba como cuidaba su pelo, el mimo que le otorgaba sin apenas poner objeciones. Siempre pensó, después de ver Memorias de África, que el sencillo acto de que le lavasen el pelo, era uno de los actos más eróticos que jamás hubiese presenciado. Así se lo comentó un día mientras descansaban después de una severa …

Ladrones de entrañas

Hay artes nobles y otros, en cambio, se cuelan desde lo más profundo de la miseria humana para, vestidos con ornamentos adecuados, maquillar de manera sibilina lo que no son, enmascarando sus mediocridades y falsificando con cierto prestigio una impostura que se queda en muchas retinas y demasiadas pieles. Bajo este enjambre electrónico, es difícil …

Toda tortura merece un final.

Es como esos libros que te entusiasman, que lees cuantas veces sea necesario porque en cada lectura encontrarás algo diferente, algo que añadir a todo aquello que te hizo sentir afortunado. Quizá a veces encuentras algo contrario a lo que pensaste, matices pequeños o grandes, a saber, pero siempre son estimulantes. Pero al contrario que …

Roller coaster – Sylvie

Los días se precipitaban tan rápido que era incapaz de asimilar todas las emociones físicas a las que era sometida. Por primera vez en su vida sentía que se abandonaba a otra persona, que se dejaba caer a ciegas sabiendo que en el último instante unos brazos amortiguarían la caída, haciéndola suave y placentera. Pero …

El fin del mundo

La lluvia arreciaba sin descanso desde hacía tres días. El oleaje combatía con fiereza contra los firmes acantilados en una batalla que ya duraba centurias y en la que aparentemente no se vislumbraba un ganador. Retumbaba tan fuerte esa furia que casi apagaba el agudo chillido del viento infiltrándose por los pequeños recovecos de las paredes …

El romántico BDSM

Ella estaba allí, leyendo, con voz pausada, arrodillada y aparentemente entregada. Disfrutaba de todo aquel ritual que a mí siempre me pareció pura parafernalia, pero yo era un invitado. Se suponía debía estar honrado presenciando como aquella dulzura recitaba el contrato, casi de carrerilla, esperanzada por ser en breves instantes orgullosa portadora de un collar …

El sol que más calienta

Se sentía pequeña y frágil a su lado. Siempre pensó que crecería con su ayuda pero desde hacía días se descolgaba de manera microscópica por las lianas de su barba, enmudeciendo ante el bramido de su voz. No recordaba una sensación similar en su vida. Se apostaba bajo su cuello, protegiéndose de la metralla de …

Pinturas de guerra

El día había sido divertido y sobre todo azul. La mayor parte fue un juego en el que ambos pintaron con sus dedos los deseos del presente, mezclando los colores de la vida con los de la pintura que ya empezaba a secarse en las paredes. Se sentían cansados pero satisfechos. Habían sido unas horas …

Si no sabes lo que es la entrega, ¿cómo te atreves a ser sumisa?

Esa perla que he utilizado como título de esta entrada, es una de las muchas sandeces que algunos dominantes intentan insuflar, contaminando la inteligencia con su estupidez de manual amarillo. Da igual el tiempo que convivas con una sumisa, o la dedicación que hayas necesitado para que ella sienta que está en las mejores manos …

Ira e impotencia

No son pocas veces las que las lagrimas incontroladas no motivadas por una acción directa me bloquean unos segundos. Intentando asimilar por qué se producen y la manera de aliviarlas sin perder ese poso de estabilidad, de no flaquear para que ella, y aún destruida, se sienta reforzada y protegida. Muchos de esos instantes son …