Dynamite

Lo hermoso, lo fluido, lo dulce. Mientras la ola se mantiene arriba y tú con ella, el sol en el ocaso es majestuoso, anaranjado y brillante. El tiempo se ralentiza, el agua es tibia y empapa el poco recelo que aún te queda con la vida. Mantenerse ahí no es difícil, llegar allí sí. Pero …

Necesidad

Ahora, después de tanto tiempo, las preguntas son otras. No tan profundas, más mundanas, más de improvisar por una circunstancia que nos saca de la rutina. Pero antes no era así. ¿En qué momento algo que nunca había pasado por tu imaginación, incluso estaba tan lejos de tus deseos o necesidades se convierte en algo …

El reloj de arena

El tiempo no sana. El tiempo sólo es inexorable, avanza impertérrito y borra con saña lo que vamos dejando atrás. Se olvidan las miradas, los sonidos, los sabores. Se olvidan los gemidos y los deseos que la saliva proyectada hacia el suelo construía un hermoso pasado. Pero el pasado son tan solo ruinas que se …

Perversos

En aquellos vacíos y silencios gélidos, siempre recordaba la primera vez que le dijo que las perversiones sólo tienen sentido si se comparten en la intimidad de las palabras susurradas en la boca. Aquella vez se dio cuenta de cómo, por mucho que dibujes tus propias perversiones, no son más que imágenes difuminadas de deseos …

Caminando sobre las aguas

Es difícil estar acompañado. Mucho más sentirse acompañado. Casi imposible ser compañía sin todo lo anterior. El alcohol descendía por la garganta como si un grupo de escaladores tuviese prisa por llegar al campo base y clavaban los crampones a mala hostia. Mientras intentaba aferrarme a esa picazón, ella miraba desde cierta distancia. Metía algo …

¿Cuánto tiempo es suficiente?

Hace poco recordaba un momento efímero en el tiempo, pero permanente en la memoria. Un momento que sintetizó cada uno de los deseos y materializó, como un chasquido que aún resuena en mi memoria, lo que soy, lo que era y lo que seguiré siendo. Aquel día, hace ya muchos años, esperábamos el ascensor desde …

El filo

A ella le gustaban las cuerdas. A él le gustaba el acero. Cada uno disfrutaba de las cosas a su manera. Pocas veces ella expresaba lo que aquel roce y la consiguiente presión le trasmitía. Daba lo mismo que estuviera sobre el suelo o suspendida, balanceándose ligera a escasos centímetros del hormigón, la tierra o …

Grados de confianza

¿En cuánta gente confías? La pregunta tenía ese aire tramposo que hacía de la respuesta un terreno delicado. Se tomó su tiempo para contestar, no por sentir tramposa la pregunta y por tanto la respuesta incierta, sino porque en realidad nunca se había parado a pensar sobre aquello. Tenía clara la confianza y en quién …

Al paso

Odiaba el puto boken como amaba la mano que lo empuñaba. Siempre le pareció extraño que lo utilizase como fusta, como vara, como prolongación de sus brazos. Odiaba el ruido que hacía cuando cortaba el aire antes de golpear en su carne. Lo odiaba tanto que era la única herramienta que conseguía sacar unos hermosos …

Vermont

Cuando el miedo aparecía y las dudas se acumulaban en la comisura de la boca, viajábamos al norte. Nunca el lugar estaba premeditado y siempre tenía que ver con mi estado de ánimo. Tampoco era un viaje organizado en el que preparásemos muchas cosas, tan solo lo indispensable. Yo me dejaba llevar y descubría que …