Esnobs

“Mi aura invisible me precede, me rodea e ilumina cada fibra de mi esencia dominante y casi nadie está preparado para observar de cerca lo que eso conlleva. Pocas son las elegidas que pueden mirar en mis ojos y no quemarse las retinas sin darse cuenta más tarde que son incapaces de percibir en toda …

Macedonia

El jugo se escurría por los antebrazos mientras los dedos despedazaban la fruta en grandes trozos. Mucho antes, el cuchillo había quitado la piel que recubría la pulpa y recordaba las punzadas de dolor atravesando sus piernas. Rompía la fruta con energía, azucarando la piel mientras los recuerdos se ordenaban ante sus ojos y recordaba …

Temblores

Se sujetaba a las cuerdas con tanta fuerza que sentía como la columna se estiraba sin límite mientras los músculos soportaban  la tensión del descontrol. Formaba una X perfecta que solo se desdibujaba cuando intentaba retorcerse sin mucho éxito. El sudor hacía brillar su vientre y las sabanas hacía mucho ya que estaban empapadas. El …

Corteza

Era suerte, quizá. Cuando la piel se despegaba de los restos de resina y de corteza se mantenían clavados. Tardó casi una hora en conseguir que abrazase a aquel tronco inmenso, con las piernas separadas y algo flexionadas y los brazos en un ligero ángulo por encima de sus hombros. Las muñecas, casi inmóviles y …

Vendaval

Qué difícil era encontrar la integridad, se decía mientras le daba un sorbo a la copa de vino. La fantasmagórica presencia de ella en algunos hombres, que se envolvían haciendo de ella una capa que les otorgaba un aura mística y un porte majestuoso. Se les veía llegar y ella casi siempre claudicaba esperando que …

La vida pasa

El agua estaba fresca, la botella húmeda y el aire, esa brisa del atardecer que traía el olor a hierba cortada y a romero se mezclaba con la oscuridad de las nubes que amenazaban lluvia. Sin embargo apoyó la espalda en el respaldo y se puso cómodo. Se miró las botas, más limpias que de …

Selene

El grito se pierde en el horizonte, ni siquiera el aire es capaz de amortiguar la cólera y refrescar el espíritu. Podría estar gritando eternamente y no se aplacaría esta desazón que le abrigaba. El rechinar de los dientes, conteniendo de alguna manera la tensión de los músculos, el ácido que corroía su interior, los …

El periódico

El crujir del papel le llamaba la atención, como a los bebés. Escuchaba con atención los silencios solo rotos por las hojas separándose entre sí y como con las manos las aplanaba y estiraba para luego levantarlo ligeramente. Desde donde estaba, con las rodillas sobre la alfombra solo podía verle los ojos, enfrascados en una …

La mirilla

Hubo un tiempo en el que se podía observar el mundo desde lo alto de una colina, sintiendo el frescor del aire, a veces la lluvia fina golpeando la cara con suavidad y cuando ésta arreciaba, como si la ira de los dioses clavasen sus miserias en la cara. Hubo un tiempo en el que …

Dispendio

Siempre le fascinó la facilidad con las que las mujeres exhiben su cuerpo desnudo. Aquellas que no temen el reproche o la vergüenza hace mucho partió en un viaje sin retorno. En cambio, aquellos hombres siempre pertrechados en sus trajes, deambulaban intentando aparentar esa hombría escondida bajo sus pantalones y disimulando como la boca se …