Espiral
Lo hacía a propósito. Ambos lo sabían. Comenzar a subir por aquella espiral de madera y metal, ralentizando el paso, haciendo sonar más de la cuenta el tacón contra el escalón, conseguir que el vuelo de la falda comenzase un vaivén interminable y lento mientras los músculos estilizados de las piernas se transformaban en robustos …